Un conflicto de apenas dos días entre Aeroméxico y el sindicato de pilotos, resultó en más de 50 cancelaciones de vuelos y más de 300 retrasos, lo que llevó a una rápida reconciliación, luego de que ejecutivos de la compañía, desestimaran las exigencias expresadas por los pilotos.
La aerolínea que encabeza Andrés Conesa llegó a un principio de acuerdo con la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), e instalaron una mesa de trabajo, dirigida a resolver demoras y cancelaciones de vuelos.
“ASPA de México tuvo el acercamiento con la directiva de la empresa, con el objetivo de apoyarlos para optimizar la planeación operacional”, dijo el capitán José Alonso, vocero de la Asociación.
Agregó que con esta mesa de trabajo prevalecerá el diálogo constructivo y será pilar para seguir ofreciendo el servicio de calidad que Aeroméxico y ASPA han ofrecido por casi 90 años de operación.
La Asociación mantiene el optimismo para que los puntos a tratar se resuelvan de la mejor manera y con las mejores condiciones para los 1,904 pilotos que pertenecen a ASPA, y que laboran en Aeroméxico.
Confió en que la empresa corrija su organización en el área de Planeación y Tripulaciones y únicamente las demoras y cancelaciones sean por situaciones climáticas.
Previamente, la aerolínea había señalado que los problemas citados eran consecuencia de “una política de cero apoyos”, ante disrupciones que son comunes en la aviación mundial, por parte de la dirigencia de la ASPA.
Mientras que, los pilotos argumentaron que no se puede ahora pedir a los pilotos que hagan mucho más de sus jornadas estipuladas, ya que correspondía a la aerolínea tener una mejor planeación cuya prioridad son la seguridad operativa, así como la seguridad de los usuarios.
Edna Herrera
