El Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), está enfrentando un dilema complejo: asegurar una vigilancia rigurosa en puertos, aeropuertos y fronteras para garantizar la sanidad y la seguridad de los productos agroalimentarios, mientras que el presupuesto destinado a este fin ha experimentado una reducción del 42% en términos reales desde 2018.
La creciente demanda de control sanitario y fitosanitario en las aduanas y puntos de entrada al país se ha visto exacerbada por la necesidad de prevenir la propagación de plagas y enfermedades que podrían afectar tanto la producción interna como los productos importados. El director General de Inocuidad Agroalimentaria, Acuícola y Pesquera de Senasica, David Soriana García, subrayó la importancia de adoptar medidas preventivas y de mantener una vigilancia constante en los productos que entran y salen del país.
Sin embargo, la asignación presupuestaria actual ha dejado al organismo en una situación desafiante. Con un presupuesto actual de 5 mil millones de pesos para 2023, en comparación con los 6 mil 800 millones de pesos en 2018, Senasica debe buscar formas de optimizar sus recursos para seguir cumpliendo su misión crucial. Soriana García destacó que, a pesar de la reducción presupuestaria, los esfuerzos se han centrado en una distribución más eficiente de los recursos disponibles.
Aumento en exigencias choca con reducción presupuestaria
El sector privado también se ha pronunciado sobre la necesidad de mayor financiamiento para los programas de sanidad e inocuidad. Mario Puente, vicepresidente de Sanidad e Inocuidad del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), ha señalado que un mayor presupuesto sería esencial para garantizar la eficacia y la solidez de estas iniciativas vitales. Puente sugiere que la colaboración entre el sector público y privado podría ser una estrategia para abordar la brecha financiera.
En este contexto, Senasica ha anunciado la realización del primer Congreso Nacional de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria, un evento que reunirá a expertos y profesionales para discutir los desafíos actuales en el ámbito. Este encuentro también será una oportunidad para explorar soluciones creativas y sostenibles ante las restricciones presupuestarias que enfrenta el organismo.
En resumen, el Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) se enfrenta al desafío de mantener una vigilancia rigurosa en puntos de entrada al país y asegurar la calidad de los productos agroalimentarios en medio de una reducción presupuestaria significativa. Mientras la brecha financiera persiste, Senasica se esfuerza por encontrar formas de operar con eficiencia y continúa colaborando con el sector privado en busca de soluciones viables.
Edna Herrera