Los días de Calica, subsidiaria de Vulcan Materials Company (VMC), están contados en México como concesionario de una mina de piedra caliza y de un muelle y terminal marítima en Quintana Roo.
La semana pasada Andrés Manuel López Obrador advirtió a la empresa que realizaría una denuncia formal ante organismos internacionales si ésta no detenía su operación de extracción.
Finalmente, el viernes pasado, Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, anunció que se llegó a un acuerdo con la estadounidense VMC, para que un banco de material de construcción se convierta en un parque turístico.
De un total de 2,400 hectáreas de los terrenos, la firma cedió 1,600 hectáreas para crear un área de reserva natural.
“La Semarnat inició el levantamiento para determinar densidad. Se acordó que el material que habían extraído lo van a poder exportar; se les dio un permiso por parte de aduanas por dos meses y se va a aumentar en términos de ley hasta por tres años”, explicó.
Ahora los ingenieros militares que construyen el Tren Maya realizan una inspección para determinar si el material que tienen puede ser utilizado para el Tren Maya.
“Ellos piden que haya una estación y se comprometen a donar una parte del terreno”, aseguró el funcionario.
Además, será la Secretaría de Marina la que supervise los trabajos de ampliación del puerto para que sea apropiado para cruceros, por lo que contará con una administración portuaria a cargo de la Armada de México.
Las advertencias del mandatario se dieron en la semana, cuando en su conferencia matutina, informó que buscaba un acuerdo con la empresa estadounidense para que se clausurara la planta para transformarla en un parque ecológico o bien que el gobierno comprara el terreno de la firma minera, a la cual no se le renovaron los títulos de concesión que tenía hasta el 2037.
Previamente la Secretaría de Marina (Semar) había autorizado ampliar la vigencia original del Título de Concesión a 50 años, del 21 de abril de 1987 al 20 de abril de 2037. Sin embargo, ahora el periodo de vigencia se encuentra bajo revisión de la Dirección de Puertos de la misma dependencia debido a la negociación presidencial con VMC.
A inicios de este año el Ejecutivo federal comenzó a presionar la operación de la empresa e incluso, VMC amenazó al gobierno federal con demandar una indemnización de 500 millones de dólares de no renovar ambos títulos de concesión. Algo que no tuvo efecto pues Calica, finalmente, cedió a la petición del Ejecutivo federal.
La minera está ubicada en el kilómetro 282+600 carretera Chetumal-Cancún, dentro del recinto portuario de Punta Venado, en el municipio de Playa del Carmen (Solidaridad), en Quintana Roo.
Edna Herrera
