CIUDAD DE MÉXICO.– Las diversas compañías de cruceros continuarán alargando la suspensión de viajes, derivado de las restricciones sanitarias y de los cierres a puertos marítimos que las autoridades han impuesto por todo el mundo para evitar la propagación de COVID-19.
| Luis Reyes |
Uno de los puertos que seguirá viéndose afectado al menos hasta julio próximo, es Cozumel, el primer puerto de escala para todos los cruceros que zarpan de los home ports de Miami, sede de la mayor parte de los puertos de salida con diversos itinerarios que invariablemente arribaban a la isla mexicana.
No únicamente los cruceros estadounidenses están suspendiendo viajes en el mundo. La ola de cancelaciones se ha extendido a navieras que van a destinos como Europa, el Caribe, Mediterráneo, Australia y África, entre otros.
Costa Cruceros, operado por Carnival Corporation, anuló salidas hasta el 30 de mayo, pero aún no se sabe si en esa fecha retomará lo itinerarios; MSC Cruceros de Mediterranean Shipping Company, hasta el 29 de mayo, y el MSC Bellissima, operado por MSC Cruceros, hasta el 12 de junio.
Otros que cancelaron viajes entre mayo y junio son el Croisieurope, Royal Caribbean, Celebrity, Azamara, NCL, Princess, Holland/Seabourn, Aranui, Carnival, Pullmantur, Celestyal, Ponant, Regent, Disney, Paul Gauguin, Oceania, Cunard, Rivage Du Monde y Silversea.
Carnival Sunrise, operado por Carnival Cruise Line, informó que para trabajar en conjunto con el gobierno norteamericano y apoyar la respuesta global, todos los itinerarios desde los EE.UU., han sido cancelados hasta el 26 de junio y, se reanudarán nuevamente el 27 de junio, aunque es una fecha tentativa.
En los EE.UU. y en México, este sector es una arteria vital para la economía derivada del turismo, ya que respalda más de 421 mil empleos directos e indirectos y anualmente contribuye con casi 53 mil millones de dólares, además de que apoya a agencias de viajes, aerolíneas, hoteles y a una amplia cadena de suministro de industrias.
Las empresas de cruceros de EE.UU., recomiendan a los huéspedes que reservaron itinerarios y se verán afectados por esta situación sanitaria, se comuniquen con sus asesores de viajes o directamente por teléfono con sus líneas de cruceros.
“Esto es decepcionante, pero estamos comprometidos a ser un socio fuerte con el gobierno y a tomar las medidas necesarias para mantener la confianza del público en nuestro negocio” detalló Carnival Sunrise, que cuenta con una de las principales flotas internacionales.
Indicó que, si algún viaje contratado con anterioridad se ha visto afectado, el cliente recibirá un correo electrónico de la naviera o de su asesor de viajes, el cual tendrá las instrucciones que necesita para reclamar su oferta de cancelación o en su defecto el reembolso.
“Nuestro centro de llamadas continúa experimentando un volumen muy alto, por lo que la forma más rápida de reclamar es utilizando el enlace en el correo electrónico. Como siempre, queremos extender nuestro agradecimiento a todos nuestros invitados y agentes de viajes por continuar apoyándonos. Todos manténgase seguros y bien”, dijo la firma de cruceros.
La parálisis causada por el COVID-19 es una situación sin precedentes en los EE.UU. La industria de cruceros asumió el compromiso de proteger la salud pública y, trabaja en equipo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, para cuidar la salud de clientes y trabajadores.