CIUDAD DE MÉXICO.- Sin avisos oficiales el puerto de Cozumel cerró de facto la entrada de buques tipo cruceros y arrancó negativamente la semana previa a las vacaciones del primer cuarto del año.
| Georgina Howard |
El último crucero que desembarcó hoy fue el MSC Divina de 333 metros de eslora y 12,722 t/pm, que ingresó a muelles de la Isla de Cozumel, debido a que todos los puertos de los Estados Unidos se encuentran cerrados debido a la alerta emitida por la OMS, ante la pandemia del COVID-19 que azota al mundo.
Como parte del cierre de Cozumel, advirtieron fuentes del sector, los cruceros turísticos de las mayores líneas del mundo que escalan las terminales de este puerto, podrían reducirse hasta en 25% durante 2020, en cálculos preliminares.
El flujo de pasajeros representó en 2019 la llegada de 4.5 millones de paseantes y 1,369 arribos, pero ahora el tránsito de turistas y buques se detuvo por completo.
Esta medida presumiblemente de la Capitanía del Puerto, implica una afectación de entre un 20 y 25% de los pasajeros y arribos para 2020 y de forma abrupta en los meses de marzo, abril y mayo, lo que generará un enfriamiento de la dinámica comercial de Cozumel, ya que el mercado que abastece y ofrece servicios para la principal actividad comercial también se paralizará.
Con el cierre de Cozumel se detendrá también el mercado de tours, amenidades y demás servicios que expresamente se dedican a este mercado.
Se estima que la demanda del servicio de pasajeros y de carga disminuyan en marzo, abril y mayo un 50% y 60%, respectivamente, en contraste a igual lapso del año anterior.
Empresarios del ramo consultados gestionan un esquema de colaboración y compromiso con todos los involucrados en este sector -incluidas las autoridades-, y pidieron que haya congruencia en las políticas que se vayan a implementar en materia de contingencia sanitaria.
Anunciaron, asimismo, que presentarán un frente común con la Secretaría de Marina, de Comunicaciones y Transportes, Sector Salud, Administración Portuaria Integral de Quintana Roo, Gobierno del estado y cualquier autoridad que pueda aportar en el tema.
“Se contará con un Comité Central conformado por un equipo multidisciplinario que evaluará el avance del problema, los riesgos y las acciones que deberán implementarse para mitigar en lo posible el daño a la operación y continuidad del negocio en todos sus aspectos”.
Se designó al Capitán Javier Medina Ravell como vocero encargado de la comunicación con el personal, proveedores y clientes.
Los empresarios agregaron que se mantendrán en la medida de lo posible las plazas laborales existentes, buscando la correcta y eficiente organización con su personal.
Por lo pronto se disminuirán los gastos al mínimo, y se invertirá en equipos de desinfección para la contingencia en las líneas navieras que cruzan desde los litorales del país a la isla.