CIUDAD DE MÉXICO.- La industria de cruceros recibió desde principios de año un duro golpe para su ingreso o salida de los puertos mexicanos de Baja California Sur, luego de que la Dirección General de Marina Mercante de la SCT, reimpusiera la obligación de utilizar pilotos de puertos.
| Gabriel Rodríguez |
De acuerdo con el Oficio 7.2.507.101/2017 del pasado 7 de enero, el encargado del Despacho del Puerto de Cabo San Lucas, Braulio Cota Álvarez, informó a los prestadores de servicios de ese puerto, terminales y representantes de líneas marítimas, de la disposición basada en un acuerdo de hace 17 años.
La medida de utilizar obligatoriamente el pilotaje se reeditó en los puertos de Cabo San Lucas, La Paz, Santa Rosalía y San Carlos, para todas las embarcaciones mayores a 500 unidades de registro bruto, que en su mayoría impactará a los cruceros internacionales.
Según el oficio dirigido también al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), como responsable de la operación de uno de esos recintos marítimos, se deberán utilizar pilotos en maniobras de fondeo, atraque, desatraque, enmienda, espera, arribo o partida de los buques.
Cota Álvarez explicó que esta disposición se da con base en el oficio 7.2.0185 folio 0532 del 25 de enero, emitido por la Dirección General de Marina Mercante que encabeza Pedro Pablo Zepeda Bermúdez, donde se justifican diversos aspectos de presunta seguridad.
Este ordenamiento afecta principalmente a la industria de cruceros, al encarecer los servicios portuarios y las tarifas para ingresar a aguas nacionales, frente a los costos internacionales.
De manera específica, los agremiados de la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC), resultarán con fuertes repercusiones debido a que deberán pagar por servicios innecesarios para la navegación interior en puertos naturales que no cuentan con infraestructura especializada.
Los pilotos directamente beneficiados serán Anilam Álvarez Estrada y Marco Antonio Salazar Urrea, a quienes las propias autoridades promocionan en su oficio como los prácticos autorizados para prestar el servicio de pilotaje.
Por la alta tecnología de posicionamiento dinámico y autonomía de las embarcaciones tipo cruceros, en un puerto como el de Cabo San Lucas, resulta innecesario el pilotaje, ya que los buques no ingresan a muelles, ni utilizan canales de navegación, únicamente se fondean en el puerto natural de abrigo, lo que no requiere de maniobras.
Para reimponer este servicio, la Dirección de Marina Mercante de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), rescató un acuerdo del 11 de septiembre de 1991, donde se impuso el servicio de pilotaje por seguridad; que había caído en desuso y aplicación por su inoperancia.