CIUDAD DE MÉXICO.- La economía de México está en una etapa de flexibilización de los precios de los combustibles, vinculados a los costos internacionales, como fase de transición para la competencia en el suministro, aseguró Yuriria Mascott Pérez, Subsecretaria de Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
| Viridiana Quintero |
La funcionaria resaltó que los cambios en materia de combustibles son una nueva realidad que plantea oportunidades y retos sensibles para la economía del país.
De manera que “México no puede aislarse en un mundo globalizado, ni podía mantener una situación frágil e irreal que, de no haberse corregido, habría causado más daño a la economía, a las empresas y a los ciudadanos”.
Argumentó que las principales cámaras y asociaciones del transporte, aun siendo de los sectores directamente afectados, han asumido con responsabilidad su participación para sumarse a esta medida.
También refirió que son evidentes las ventajas de los sistemas de transporte masivo de pasajeros, que en las ciudades generan economías de escala, reducen el consumo de combustibles, optimizan los espacios urbanos y agilizan el tránsito vehicular -que en el caso del transporte interurbano-, permiten mayor seguridad y fortalecen la conectividad de forma eficaz.
Las tecnologías diversifican y optimizan el consumo de los combustibles, por ello, diseños más eficientes y el uso de biocombustibles en la aviación, así como vehículos híbridos, eléctricos o de gas natural en el transporte terrestre, representan una transformación, dijo.
Yuriria Mascott indicó que las empresas deberán considerar la gestión del combustible como un aspecto estratégico en la industria del transporte, además de que éste también es un elemento clave de cualquier cadena productiva.
Para fortalecer los mecanismos de apoyo a los pequeños transportistas, señaló que el Gobierno Federal y las asociaciones del sector juegan un papel indispensable que permitirá enfrentar en conjunto estas nuevas oportunidades.