El asesor de contenidos de Logistics Word Summit & Expo, Luis Masse, explicó las ventajas que implica el Nearshoring como parte de la llegada de automóviles eléctricos Tesla a México.

En entrevista con Info-Transportes, el especialista dijo que el parque industrial donde se tiene previsto instalarse Tesla, en un área de 8.4 kilómetros cuadrados, se encuentra en el municipio de Salinas Victoria, aproximadamente a 20 kilómetros de Monterrey y 200 kilómetros de Lardo, Texas.

Tesla planea una inversión inicial de cinco mil millones de dólares, estrategia que traerá consigo el crear fuentes de empleo, oportunidades a proveedores locales y nacionales que tengan que ver con insumos productos (asientos, llantas, trasmisiones) y crecimiento económico para la región y el país en general.

A su vez, de oportunidad para empresas nacionales tanto de productoras de artículos manufacturados, de servicios directos e indirectos, servicios logísticos, transporte, distribución y almacenaje, entre otros, “para tener un cliente local muy fuerte”, y el crecimiento de PyMEs.

Además, de que se contempla menores costos de producción, y mano de obra, solo debajo de China.

“Es parte del Nearshoring, es una tendencia global que México debe de capitalizar y aprovechar, para traer más inversión extranjera, aprovechando los 3,105 km de frontera con EE.UU., el acuerdo comercial del T-MEC, e infraestructura logística, puertos marítimos, carreteras, aeropuertos, vías ferroviarias, aduanas y nodos logísticos”, indicó el directivo.

Con estas conexiones multimodales de transporte en México, Tesla distribuirá de mejor manera a su mercado más importante, que es EE.UU. “un país de alto consumo”, una parte de su producción México, y otras partes del mundo.

La llegada de Tesla, abre un panorama de confianza en el país que sea más atractivo para empresas extranjeras invertir.

Los retos que enfrentará Tesla cuando esta planta en Nuevo León, será la mano de obra capacitada y calificada para la fabricación de vehículos con motores eléctricos y acomodarse al estilo de trabajo mexicano, como los sindicatos, tratados comerciales vigentes, como el T-MEC y el medio ambiente.

Además, de la escasez de agua en la región, motivo por el cual se contemplaba la reubicación aproximada al AIFA, por lo que quedará pendiente demostrar que esta planta sustente y demuestre que sus operaciones no sean negativos para la comunidad.

Así como la extracción de Litio, que demandará una gran inversión para la infraestructura, la verificación de la calidad de este material y la suficiencia para la demanda de baterías que requerirá Tesla, para evitar cuellos de botella en su cadena de suministro.

Daniel Zurita